Dos prólogos, dos libros: Memoria de los sueños y Apud. Joaquín Fabrellas
I.
INTRODUCCIÓN
de Memoria de los sueños
Justifica este volumen, Memoria de los sueños, la relevancia académica y estilística
adquirida a lo largo del tiempo, y en especial, en estos últimos años, de la
obra del narrador y poeta Francisco Ferrer Lerín (Barcelona, 1942). Diferentes
han sido las publicaciones especializadas sobre su variada obra, así como las
diversas investigaciones que se están llevando a cabo recientemente sobre el
concepto acuñado por él mismo, «Arte Casual», y las conexiones de este con su
obra escrita. Su relevancia lírica queda demostrada después de la reciente
aparición de Poesía reunida, que recoge, en un solo volumen, todos los libros
de Lerín, algunos inencontrables, por azares bibliográficos ajenos a su
relevancia, los cuales, vuelven a pre sentarse a su público fiel. Porque esa es
una de las razones de este volumen, su significación literaria viene avalada
por su actualidad. Por ello, se reúnen aquí, a modo de fortuna crítica, algunos
de los textos más señalados, y que se han recogido a lo largo de los años, de
la crítica especializada. Se divide este volumen en dos secciones: Artículos y
prólogos y Ferrer Lerín en sus propias palabras, donde se ofrecen una selección
de entrevistas, en las que da claves esenciales sobre su vida y obra. No se
trata pues de reunir aquí todo el material vertido sobre su obra, labor que
excedería cualquier publicación aconsejable, sino que se han querido exponer
aquellos trabajos que explican su obra total, ya sea narrativa o lírica, y que,
además, demuestren los puntos de conexión entre los diferentes críticos que han
hablado sobre una trayectoria literaria tan inusual como la suya, con una pausa
literaria de treinta y tres años. Así, participan en este volumen profesores,
académicos de la RAE, críticos y editores, entre los que se cuentan: Túa Blesa,
gran conocedor de su obra; Félix de Azúa, académico y escritor, cuyas
aportaciones han sido siempre clarificadoras. Pere Gimferrer, quien firmara los
prólogos de dos de sus primeros libros, amigos, además, los tres, desde la
juventud, por lo que sus textos son un aporte histórico a la trayectoria del
poeta, donde se le nombra además «padre nutricio de la secta “novísima”», en
cuya nómina no entraría, como ya sabemos. Por otra parte, se han reunido aquí aportaciones
más recientes de otros escritores y especialistas en la obra de Ferrer Lerín
como: Javier Ozón, biógrafo y editor de su obra; el antólogo Carlos Jiménez
Arribas; la académica Carme Riera, condiscípula en su etapa universitaria
durante Filología Hispánica; el escritor Juan Manuel Molina Damiani, que
desgrana su narrativa; el profesor Antonio Viñuales, fundamental para entender
su narrativa breve, en especial, los «casos»; Fernando Valls que firma el epílogo
de Gingival. Y periodistas como Antón Castro, Ester Peñas o Andrés Seoane que
han desvestido el alma leriniana en diferentes entrevistas. Piezas todas que
explican su proceder, su manera narrativa, su escritura liminar desde el punto
de vista crítico y estético. Por ello, este es un libro necesario para el
estudioso, pero también para el lector inquieto que quiera armar el
rompecabezas leriniano, y una ayuda fundamental para quien quiera escanear su profundo
universo lírico o adentrarse en los recovecos creativos de nuestro autor. Se
trata de poner de relieve la importancia poética y narrativa de la obra de
Ferrer Lerín desde la perspectiva de la crítica, creando así un diálogo abierto,
contrastando opiniones y formando constelaciones conceptuales, algunas
conocidas como: «plagio inverso», «escritura liminar», «la literatura del
desecho», «narrativa del informe» y los índices, así como el proceso, en
determinadas ocasiones, «semiautomático» de la obra leriniana. Refundar las
bases de su exégesis para desmontar viejos mitos repetidos basados en su
rareza, la cual, atiende más a una incapacidad crítica que a motivos reales.
Aquí se dan cita todos los crí ticos que han aportado una visión nueva a la
obra de Lerín, de ese modo, se llegará a una nueva visión del conjunto de la
obra en su totalidad, poniendo en contraste ciertas zonas que debían clarificarse.
Su poesía antisentimental, antirromántica y antisimbólica de un autor que ha
creado una mitología propia y, su narrativa aséptica y casi científica, la
cual, lo ha convertido en uno de los más altos valores de la creación literaria
de nuestra época. Una litera tura con una valencia única, que habita entre
diferentes lugares, ocupando esa región leriniana tan reconocida entre sus
lectores.
Con Eduardo Mendoza, Valerie Miles, Aurelio Major, Frederic Amat, Ramón Girbau, Concepción Jiménez, y unos amigos en el restaurante Igueldo, Barcelona. 2024.
JOAQUÍN FABRELLAS
II Introducción de Apud, en Libros del Innombrable
ESTE VOLUMEN SURGE
DEL interés provocado por la obra
escrita
y visual leriniana, y junto a la Exposición
comisariada por la docen-
te Carmen Aguayo, dicha muestra tuvo lugar en la
Biblioteca públi-
ca de Jaén en el mes de abril de 2024 sobre Arte
Casual. Término
acuñado por el escritor Francisco Ferrer Lerín en
1984, (véase el
Manifiesto en Adenda), el cual se refiere a toda
manifestación artís-
tica que tiene que ver solo con la experiencia del
observador, de
manera subjetiva de un objeto, instalación o montaje,
ajeno a la
intención artística, y que, sin embargo, en su
conjunto, puede ser
valorada como tal.
Además de esta Exposición, se contó también con la
aparición
del libro Atlas
de Arte Casual, publicada por Jot Down Books en
2024, donde se daba una cumplida cuenta de algunas de
las más
recientes manifestaciones de AC, y dicha obra viene a sumarse a la
anterior publicación: Arte Casual, (Athenaica, 2019), donde una
serie de teóricos y artistas
comparten sus experiencias críticas sobre
este concepto tan dúctil.
Ferrer Lerín habla con la comisaria de la exposición de Arte Casual en Jaén, Carmen Aguayo, y con el coordinador de Apud, Joaquín Fabrellas, de espaldas, en la Biblioteca Pública de Jaén.
Foto de Fran Ferrer
Por otra parte, la Exposición de
AC en Jaén, viene a sumarse a dos
Exposiciones anteriores, la
primera, en el MACE de Ibiza en 2016, y pos-
teriormente, en Málaga, en el
Rectorado de la Universidad, en 2018.
Esta reciente Exposición de Jaén
ha servido para que una serie de
críticos y escritores,
consideren y escriban sobre las raíces del AC que
se encuentran diseminadas en la
obra literaria de Ferrer Lerín y cómo
ha podido así influir este
concepto en su obra lírica, y viceversa.
Asimismo, tratamos de explicar aquí los vínculos con
las escue-
las europeas de vanguardia, como pondrán de manifiesto
Juan Buil
en su trabajo, o Carmen Aguayo, tratando de vincular
el AC con las
escuelas francesas de la entonces incipiente
fotografía del siglo XIX
y con artistas como Brassaï, Man Ray, o con escuelas
de pintura
contemporánea como la de Antoni Tàpies.
Molina Damiani por su parte hará una semblanza entre
lírica y
crítica sobre la figura de Ferrer Lerín, donde el
humor es la clave,
como en gran parte de su obra.
Imagen de la Exposición de Arte Casual en la Biblioteca de Jaén. abril, 2024.
Foto de Fran Ferrer
Ferrer Lerín nos dará su visión sobre el fenómeno del AC y de
las distintas secciones de las que hemos venido
hablando.
Se consideró además, en las
diferentes conversaciones previas a la
Exposición, la posibilidad de
hablar del autor como artista total, y de
eso habla el propio Ferrer Lerín
en el primer texto de esta serie, ya
que su obra, no solo se
circunscribe a la escritura, sino que, además,
recopila material heterogéneo,
observa atento la realidad circundante,
relata los sueños,
contorsiona el cuerpo, convierte el grito en trazo,
mezcla géneros, combina lo
visual con lo escrito y, en lo escrito, hace
acopio de material reservado
para otros menesteres que él usa como
literarios; se trata pues de una
gran mezcla de texturas, capas, filtros,
profundidades léxicas, visuales,
oníricas, sensoriales, fonéticas, que pro-
ceden de una gran variedad de
fuentes; preocupaciones estas que
tienen que ver con la preparación
total similar a la que hacen otros
artistas, pintores, dibujantes o
escultores para llevar a cabo su labor.
No solo la preparación de todas estas técnicas, sino
que Lerín
lleva a cabo otra serie de manifestaciones artísticas
que conviven
en su idiosincrasia creativa, y que, de alguna manera,
componen la
variada gama de interconexiones que alternan y se
suman a su ya
arriesgada literatura liminar y fronteriza.
En la Exposición pudieron verse: Acciones, AC, Viñetas, dejan-
do de lado, por ser algo plenamente literario, los
casos, y aplazando
para otro momento la reunión de los Alaridos.
Las Acciones lerinianas son «rigurosas alteraciones de
la com-
postura humana», acciones que sobresalen de la
normalidad, la
apariencia de estar en un set de rodaje, la
preparación de una esce-
na, el motor de la creación.
El AC
tienen que ver con un soporte fotográfico, la fotografía
no es AC per
se, sino que remite a ese lugar en donde se encontraba
el objeto, la instalación o el
desgarrón en la pared con forma de
expresión abstracta que un
espectador avisado descubre furtivamen-
te, y eso se transporta en la
foto antes de su desaparición definitiva.
Las Viñetas son, por su parte,
una mezcla de texto e imagen, lo
visual siempre ocupa un lugar
predominante en la obra leriniana, desde
el cine, como lenguaje plástico
que conforma las estructuras sintácticas
y narratológicas de los textos
lerinianos, a las diferentes composiciones
que conducen a la intrincada
configuración estética de nuestro autor.
Los casos, son, como afirmó en su libro Casos completos (2023)
Antonio Viñuales, un género de honda raigambre
castellana, ya
desde el Lazarillo se puede ver el relato del caso,
pero que Lerín
transforma con mano decidida en un género propio y va
desde el
informe científico al subgénero
policial, o al estricto informe comer-
cial, aséptico, que también está presente en ciertos
relatos.
Los Alaridos, por su parte, son recurrencias fónicas,
donde el
significante predomina sobre el significado,
recuerdos, imitaciones
fónicas de momentos alejados en el tiempo, desde la
infancia, hasta
el presente, que Lerín reproduce como el chamán de una
tribu
única, sonidos de animales, maldiciones, el nombre de
ciertos
vagabundos, conversaciones inexistentes o mugidos de
bisonte.
[https://soundcloud.com/ferrer-lerin].
El elemento fónico es algo todavía por estudiar en su
extensa
representación del fenómeno creativo. El sonido de sus
obras al
ser leídas, la tonalidad de su lírica, construida
sobre sintagmas
hallados en las profundas simas del lenguaje y sobre
la fuerza de la
palabra, la cual pivota en torno a un significado
metamórfico, en
continuo movimiento en los poemas de Ferrer Lerín,
dadas las
transformaciones diacrónicas a las que somete las
palabras.
·
Intentamos explicar, por tanto,
aquí, los condicionantes de la
obra leriniana, desde la
influencia surrealista, vanguardista, francesa
o prenovísima, hasta forjar una
sólida carrera de un artista singular.
Al mismo tiempo, tratamos en
estos textos de desvincular lo mani-
do de su recurrente biografía, es
decir, alejarnos del tópico que ha
venido acompañando a Lerín desde
su juventud; aquello de jugador
de póker, primer novísimo,
vanguardista, ornitólogo de campo, con-
ceptos que pueden explicar
determinadas partes de su vida y de su
obra en ciertos momentos
puntuales, pero hemos querido dejar claro
que Lerín es mucho más que la
suma de todos esos elementos
superpuestos y que explicarían de
manera parcial, una obra tan ori-
ginal, desde el punto de vista
crítico, como la de nuestro autor.
La obra no escrita de Ferrer Lerín, como vemos, sigue
conci-
tando el interés de críticos y sumando exposiciones,
conferencias,
recopilaciones, véase la reciente aparición del libro Arte
y transfor-
mación de Jesús Martínez Clará en donde se ofrece una
amplia
panorámica al arte entre siglos y se distingue a
Ferrer Lerín como
uno de los valores de este cambio transformativo del
arte contem-
poráneo por las aportaciones del AC y el avizorismo de los colabora-
dores de este arte tan peculiar. «Verdadero escrutador
de lo real,
con ojo avizor está siempre alerta, buscando indicios,
rastros de
todo tipo, interesado, expectante, atento como un
perro de caza
acecha a su presa,[…] Creo que sería interesante
analizar toda la
narrativa de FFL buscando esos rastros, indicios de
buen cazador
de presas artísticas[…].
[…]» FFL ha roto todos los límites, ha saltado incluso
las lindes
que separan la cultura de la vida,[…] creando así un
género litera-
rio en el que todo es verosímil y falso a la vez[…]
[p. 263].
Y es que desde la redacción del Manifiesto de Arte
Casual (1984)
y su publicación por vez primera en La Vanguardia en
2011 hasta
hoy, su difusión y recepción no ha cesado, antes bien
ha ido apa-
reciendo en innumerables medios dada la originalidad
estética de
un movimiento tan dúctil como democrático, ya que
todos pueden
participar de él, eso sí, teniendo el ojo preparado.
Se ofrecen entonces las conclusiones a las que se
llegaron desde
diferentes puntos de vista y prismas propios
provocados por su
labor, un artista único en el
panorama contemporáneo, y cuyas refle-
xiones ofrecimos en una serie de conferencias que
ahora damos
aquí completas por escrito.
Joaquín Fabrellas
Cabo de Gata, agosto de 2024
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